sábado, 14 de noviembre de 2015

Camí de Sant Jaume. Santes Creus a Poblet. Camino de Santiago. Etapa 2

Un día demoledor para mis justas fuerzas pero poder compartir una pequeña parte de la vida de los monjes ha sido una experiencia difícil de olvidar.

He salido del Albergue justo después de amanecer y lo primero que he hecho ha sido tomar el camino equivocado. No estoy seguro de haber hecho más kilómetros pero el camino ha sido muy bonito.


Al poco de salir de Santes Creus, el camino sube hacia El Pla de Santamaría. Durante la subida de poco más de un kilómetro se puede ver el monasterio desde un buen ángulo. Una vez arriba, me acompañan campos de vid y unas vistas de las montañas que delimitan la Conca de Barberà cubiertas de niebla preciosos.




Resulta que esta es una zona con numerosas y bien conservadas construcciones de Pedra Seca.




Después el paisaje cambia al acercarse al Pla de Santamaría y a la civilización. Este primer tramo se ha hecho largo, casi tres horas sin ningún sitio donde poder descansar cómodamente.



De aquí a Cabra del Camp y hasta la mitad del trayecto hasta Barberà de la Conca no me ha sorprendido nada porque no he hecho ninguna foto. El camino es duro y hace subida ya que hay que llegar a la comarca de la Conca de Barberà. Al acercarnos a Barberà la vistas del pueblo son preciosas. Es un pueblo muy bonito con un celler y dos colinas, una dominada por la iglesia y otra por el castillo. La fachada de la Iglesia muestra un gran grieta que se va abriendo paso por calles y casas.








Luego hay que tomar dirección Montblanc. El camino no es especialmente bonito pero el pueblo amurallado es espectacular y entrar por el Pont Vell algo difícil de olvidar.


Aquí estaba destrozado, supongo que por el cansancio acumulado, la subida y la falta de práctica por lo que he decido tomar un taxi que me llevara hasta Poblet. Allí me esperaba el germà hostatger para llevarme a la hospedería del interior del monasterio. Después de una ducha reconfortante me esperaban en Vespres. No he entendido ni una sola palabra de lo que cantaban y rezaban los hermanos. De allí directos al Refectori para cenar servidos por dos de los hermanos y acompañados por lecturas de otro, el resto completamente en silencio.

He decidido ir también a la última oración en la Sala Capitular antes de retirarme a dormir.


El perfil y el mapa para los más curiosos.



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2 comentarios :

Unknown dijo...

como que un taxi??? a que no te ganas la bula.... ��

TMT dijo...

Estaba muerto. Seguro que el apóstol me sabrá perdonar!!